Morir a mi mismo, como el gusano de seda

En las quintas moradas nos habla Santa Teresa del gusano de seda: 

"Ya habréis oído sus maravillas en cómo se cría la seda, que solo el pudo hacer semejante invención... con hojas de moral se crían hasta que después de grandes, les ponen unas ramillas y allí con las boquillas van de sí mismos hilando la seda y hacen unos capuchillos muy apretados, adonde se encierran y acaba este gusano, que es grande y feo, y sale del mismo capullo una mariposica blanca y muy graciosa.

Pues crecido este gusano, comienza a labrar la seda y edificar la casa a donde a de morir. esta casa querría dar a entender aquí que es Cristo. En una parte me parece he leído u oído que nuestra vida esta escondida en Cristo, u que nuestra vida es Cristo.

Pues veis, Hijas, lo que podemos hacer con el favor de Dios: que su majestad mesmo sea nuestra morada, labrándola nosotras. Pues, ¡ea, hijas mías!, priesa a labrar este capuchillo y hacer esta labor quitando nuestro amor propio y nuestra voluntad, el estar asidas a ninguna cosa de la tierra, poniendo obras de penitencia, mortificación, obediencia, todo lo demás que sabéis.

Muera, muera este gusano, como lo hace en acabando de hacer para lo que fue criado, y veréis cómo vemos a Dios y nos vemos tan metidas en su grandeza, como lo esta este gusanillo, en este capucho.

¡Oh grandeza de Dios! Y cuál sale un alma de haber estado aquí un poquito medita en la grandeza de Dios, y tan junta con Él. Yo os digo, de verdad que la misma alma no se conoce a sí" (Moradas Quintas Cp. 2,2,7).

Reflexionemos juntos

Antes de seguir recordemos la palabras de Jesús: Si el grano de trigo no muere, no da fruto, pero si muere da mucho fruto o el que quiera seguirme que cargue con su cruz y me siga.

¡Que difícil resulta esto en nuestras vidas!, renunciar a nosotros mismos, a mis gustos , comodidades, ideales, sueños, en resumen hacer lo que Dios quiera, o cuando vienen las dificultades y enfermedades. No nos damos la oportunidad de sumergirnos en este capullo, que es el medio para transformarnos en eso que buscamos, nuestra libertad y felicidad; volar como la mariposa sea nuestra opción y no arrastrarnos como el gusano en el mar de nuestras miserias, levantemos la mirada que Él  espera. ¡Ánimo!

Oración

"¡Oh mi Dios y mi creador!, que matáis dejando con más vida". En tus manos Señor pongo mis debilidades y miedos, sostenme con tu gracia, para que jámas desista en esta batalla de vencerme para dejar que tu reines en mí. Amén

(Carmelo San José, Potosí )